¡AQUÍ SE JUEGA! | Jorge Ley
UN ATENTADO contra un Secretario de Seguridad (Extraordinaria frase, hay que leerla y releerla a ver si así atendemos su verdadera dimensión) es un drama de consideraciones gravísimas que, si algo demuestra, es que quienes perpetraron el intento homicida lo hicieron porque tenían motivos para verlo muerto. ¡Quia! Because of reasons, en maravillosa (no) explicación anglosajona. Hasta ahí tendríamos que leer, aunque sea para que los de la incontinencia verbal soporten las ansias de devorar el teclado los primeros 15 minutos. Yo entiendo que ejercer de miserable es un deporte de riesgo al que hay que contribuir continuamente. Pero nos podrían ahorrar sus obsesiones en la incertidumbre y salir con un «Jódase, _____«, que es más económico. Es muy comprensible, pues, que existan pequeños narcisos académicos que necesiten constantemente que les den palmaditas y les masajeen el ego, triste que su inflamado pecho no pueda ni tener la consideración mínima por una mujer asesinada. Sigue leyendo