Un Ochoa para todo

QATAR EN BLANCO Y MÁS NEGRO (I) | Jorge Ley


Con las críticas quasimundiales a propósito de un torneo porvenir y unas eliminatorias bajo mínimos, México se aposentó en Doha con mil fantasmas encima, un Martino discutido, más incluso que Osorio hace 4 años, y unas estrellas tocadas como Jiménez y otras fuera de circulación, a lo Corona, secando a Polonia y Lewandowski a tal punto que empezó a aprisionarse a sí mismo. No fue un torbellino que mareara a Szczęsny, pero jamás dio pelota por perdida con una presión y robo tal que Polonia no podía hilar una secuencia de pases decente, rogando porque el bota de oro fuese a agarrar la bola en medio de la cancha y llevarla bajo la camiseta al arco rival como si tuviera 8 años. Crímenes mucho mas grandes se ven en este Mundial. Y en Qatar. Los reales y los que se inventan.

Sigue leyendo