El zombi de la mano negra

LAS COSAS COMO SON | Jorge Ley

Un reloj parado da correctamente la hora dos veces al día. No es el caso del perteneciente al Barça, que tras arrastrar el orgullo en el Caso Neymar (No, el presidente electo aún no ha dimitido, ni se ha levantado de la cama con la intención de hacerlo) ahora tiene que lidiar con la condena a Messi por un caso de fraude fiscal. En el auto del juez se le reprocha al futbolista una «ignorancia deliberada», una especie de mecanismo mental según el cual Messi miraba hacia otro lado a la hora de revisar sus números casi tanto como realiza cambios de orientación en el campo. Sigue leyendo